Como un llamado para terminar con la inequidad territorial que causa estallidos sociales e impide un desarrollo armónico en el país, calificó el conflicto social que se vive en Aysén la Senadora por el Maule Sur, Ximena Rincón, quien aseguró que las provincias de Linares y Cauquenes son parte de las zonas que se encuentran estancadas y que, por tanto, requieren de un apoyo especial.
Al respecto, la parlamentaria dijo que una de las grandes debilidades que tiene el modelo chileno son las enormes diferencias entre regiones e incluso entre provincias al interior de una misma región, que es lo que ocurre en el Maule Sur, donde todos los indicadores son peores que en la zona norte de la Región.
“Hay zonas que tienen inversiones, altos niveles de sueldos y concentran toda la atención del aparato público, mientras que en otras lo que se siente es abandono y olvido. Por eso, creo que esta es la oportunidad no sólo para atender las justas demandas locales de Aysén, sino que para modernizar el Estado y que el desarrollo llegue a todos los habitantes del país. Por cierto es lo que ocurre en el Maule Sur y como no queremos llegar a los extremos que hoy se observan es que desde hace dos años estamos pidiendo una intervención especial en la zona, la que lamentablemente aún no llega”, sostuvo la legisladora luego de una larga conversacion telefonica con su colega y camarada, el Senador por Aysén, Patricio Walker.
En este sentido, dijo esperar una discusión que apunte más allá de la disculpa política de si éste u otros Gobierno lo hicieron bien o mal, porque en las actuales condiciones el malestar de Aysén puede replicarse en otras regiones del país y porque el origen de los problemas está en un modelo que “es un traje que al país le quedó chico”.
“Quiero saber qué propone el Gobierno para enfrentar esta centralización angustiante, cómo va a modernizar el Estado para atender demandas locales que por décadas han sido postergadas, porque esa es la discusión de fondo, porque lo que viven los ayseninos, lo sufren también los habitantes del Maule Sur, de las provincias de Linares y Cauquenes, que ven de lejos las cifras de crecimiento, no conocen los megaproyectos que se hacen en otras zonas del país y, lo que es peor, se sienten abandonados”, dijo la Senadora.
Ximena Rincón precisó que es necesario terminar con un centralismo agobiante para que todas y cada una de las regiones del país se desarrollen de manera orgánica y aprovechando al máximo sus potencialidades.
“Aysén es la punta del iceberg, por lo que es indispensable que el Gobierno ponga en el centro de las prioridades a todas las zonas de Chile que están rezagadas y que sin un apoyo especial del Estado no van a salir de esta condición”, precisó.
NEGOCIACIONES
La parlamentaria también demandó una actitud menos intransigente del Gobierno en Aysén, de manera de iniciar cuanto antes el diálogo con los líderes del movimiento social y de este modo frenar el clima de violencia y represión que se vive en el sur del país.
Al respecto, la legisladora dijo que es preocupante el errático accionar del Gobierno, que ya ha enviado a varios ministros y que le quita y entrega atribuciones a la intendenta para negociar, sin que hasta el momento haya algún avance.
“No queremos que este conflicto se extienda, porque claramente no le hace bien al país, por lo que llamamos al Gobierno a que de una vez por todas deponga su intransigencia y escuche las demandas sociales de la región de Aysén, lo que hasta ahora no ha ocurrido. De hecho, hay un ministro en la zona hace varios días, pero sólo ha puesto condiciones para dialogar, situación que potencia un clima de violencia y represión que no puede continuar”, concluyó la legisladora.
